La comunidad maya Q’eqchi’ Agua Caliente, ubicada en el Estor, Izabal, demanda al Estado de Guatemala el derecho a la propiedad colectiva. El caso llegó a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

La Corte Internacional escuchó este 09 de febrero a Rodrigo Tot, líder de la comunidad. En su declaración dijo que durante cuatro décadas han estado en trámites para obtener el título de propiedad, que según las instancias estatales, esta extraviado.

“A nosotros se nos dio un plazo para pagar la tierra, que entendiéndolo bien, no tendríamos que pagar porque empezamos hablando ser hijos de la tierra y siendo hijos de la tierra nos hacen pagar nuestra misma tierra. Cuando terminamos de pagar la tierra ante el Fondo de Tierra, se nos informa que no se puede entregar el título definitivo porque los folios fueron desaparecidos del libro de registro” dijo, durante su declaración ante la CIDH.

Esta es la primera vez que se demanda el derecho colectivo a tierras ancestrales ante la CIDH, lograr una sentencia a favor de la comunidad Q’eqchi’ Lote 9, pondría en el radar el derecho colectivo a la tierra.

La búsqueda de la certeza jurídica de la tierra es un paso de protección ante la amenaza de la minera Exmibal, conocida como CGN-Prónico, que según la comunidad, se apropió parte de su territorio. En su lucha, el 01 de octubre de 2012  fue asesinado el hijo mayor de Tot y su hijo menor fue herido con una bala en el pecho.

“Cada vez que yo hablo de la muerte de mi hijo, se me mueve el corazón del lugar, que suceda eso es muy doloroso,  mi hijo no era ningún delincuente, se preparó para ser enfermero” dice, mientras es interrogado.

Rodrigo Tot, también explica que la comunidad tiene una  relación cercana con la tierra y la naturaleza, pues son parte de su cosmovisión, por lo que solicitó a los jueces internacionales condenar la actitud del Estado de Guatemala, al no garantizar sus derechos colectivos.

Durante la primera parte de la audiencia se presentó un peritaje cultural del pueblo Q’eqchi’ realizado por la investigadora estadounidense, Victoria Sanford, quien explicó que las tierras ancestrales fueron arrebatadas al pueblo Q’eqchi’ para dárselas a alemanes.

Victoria, también explicó que la concepción de la tierra es distinta a la que tienen las personas que no son indígenas, por ello la tierra es fundamental e importante para el pueblo maya.

La comunidad agua caliente busca sentar un precedente internacional que permita la garantía del derecho colectivo a la tierra de los pueblos indígenas.