Por: Ángela Cuc, Red de comunicadoras indìgenas Jun Na’oj

Bajo la energía oxlajuj  aq’ba’l, en la comunidad Xesampual del municipio de Santa Lucia Utitlán, territorio  k’iche’,  se realizó  el torneo solsticial Tz’aneem Pitz, Pelota maya de cadera.

Se reunieron equipos de diversos pueblos de Guatemala. Participaron 10 equipos de hombres y 1 equipo de mujeres, su nombre es I’xk’at de San Martin Jilotepeque.

La pelota representa la vida, su peso puede ser desde 2 hasta 12 libras, depende de la capacidad de los y las jugadoras quienes usan la cadera para moverla.

Cada encuentro tuvo una duración de 26 minutos, el cual se divide en dos tiempos de 13 minutos cada uno. Puede cambiar el tiempo si uno de los equipos logra pasar la pelota en el aro, colocado al centro de la cancha, y este resulta ser el ganador.

Los jugadores y jugadoras señalan que esta actividad no es solamente un juego sino que es una acción sagrada, ya que es una forma de conectarse con la naturaleza y con las energías de las abuelas y abuelos.

Es místico, se necesita de mucha concentración, preparación  espiritual y física, se juega con el alma y la fuerza espiritual,  para evitar recibir golpes serios, resaltan quienes lo practican.

Cada momento es esencial, desde la saturación de los jugadores, hasta el silbato de la finalización del encuentro.

“Las y los abuelos para resolver problemas  conflictos territoriales se ponían de acuerdo entre comunidades, y disputaban el terreno, con un torneo, aceptaban las condiciones y  cada comunidad elegía a sus mejores jugadores,  empezaban el juego desde que alumbra el sol hasta que haya un ganador, a veces jugaban hasta por semanas”. Otto Zabala Yac, Ukotz’ikal Ajpu.