Trigo – “Cuerpo de Cristo”

#ComunicaciónComunitaria | Tja Mash.

Presentamos la nueva creación de Martín Martín Vásquez, uno de los artistas visuales más jóvenes e influyentes, por sus trabajos que cuestionan la realidad desde la transmodernidad y el pluriverso e invita a transformar los sistemas políticos, sociales, culturales y económicos desde un nuevo Estado para Guatemala.  

Para realizar esta muestra, tuvo que buscar la semilla del trigo, preparar y sembrar una parcela (ladera de 5 metros por 10), cuidar las plantas mientras crecían e investigaba sobre este grano que ahora es tercero en el ranking mundial de producción y consumo después del arroz y el maíz.

En la obra, representa a un hombre de la nación maya mam, empobrecido, cristianizado, despojado de sus tierras durante la colonia, a quien se le obligó cuidar los cultivos de trigo que los españoles tenían para garantizar su comida.  

EL TRIGO Y SU VENIDA A ABYA YALA O AMÉRICA

El grano tiene orígenes en el medio oriente, en regiones que corresponden hoy a Irán, Irak e Israel. Con el paso del tiempo, su cultivo se expandió; actualmente es producido principalmente por China, India, Rusia, Estados Unidos, Canadá, Francia y Australia.

Vino a América después de la invasión española, entre 1524 y 1540. Inicialmente introducido en México y se expandió a Guatemala, Centroamérica y otras regiones del continente. Para el caso de San Martín Sacatepéquez su cultivo inició por lo menos unos 30 o 40 años después de la erupción del volcán Santa María en 1902, reflejada en la obra de Martín Martín del año 2019, la siembra del trigo fue mejorándose durante la década de 1970 a 1980; aunque sin duda, durante la colonia, los distintos pueblos indígenas fueron movilizados para garantizar las plantaciones de la élite criolla y la iglesia católica que fue otra de las instituciones que acaparó muchas tierras. Después del ingreso de las hortalizas a San Martín, 1983 más o menos, fue perdiendo importancia en el comercio internacional por su poca rentabilidad en la economía dominante.

El objetivo de traer el trigo a américa era en primer lugar, para satisfacer la dieta de los españoles y las élites políticas, económicas, religiosas y militares que se habían instalado después de la invasión; en segundo lugar, para efectos de “cristianizar” porque al trigo se le considera como algo sagrado, según la biblia, es un símbolo del cristianismo; de trigo se hacían los panes y las hostias que usaban “los misioneros” en las misas, y que representa “el cuerpo de cristo, para la vida eterna”. Un tercer objetivo era incorporar el trigo en la dieta de los mayas, era “sacralizarlo” y paulatinamente abandonar el maíz que no solo era el origen y la esencia de vida de los mayas, sino de otros pueblos originarios en Abya Yala.

En el pensamiento y práctica colonial, al trigo se le consideraba como un alimento superior o comida de los “civilizados”; mientras al maíz lo consideraban como “comida para indios”, para “los pobres” o “para animales”, de hecho, en algunas regiones, a los pueblos se les impuso este producto porque después de despojarles de sus tierras y esclavizarlos en las fincas y haciendas, ya no podían cultivar maíz; se motivaba a usar  trigo, sin embargo; los pueblos siempre fueron creativos en su resistencia, cultivaron maíz en los terrenos baldíos y a escondidas; nunca dejaron de hacer sus tortillas, solo que ahora, las combinaban con trigo; algo así, como para esconder y preservar su vínculo cultural y espiritual con el maíz.    

A mediados del siglo XX el trigo en Guatemala fue teniendo poca relevancia en la economía del país frente a los cultivos de exportación como el café, banano, caña de azúcar; ya casi no se cultiva; si hay algunas plantaciones en la actualidad, solo sirve para el consumo familiar en cantidades mínimas, nunca pudo sustituir al maíz en la dieta principal de los pueblos originarios.

A pesar del discurso colonial de que el trigo era una “comida sagrada y celestial” o “para la salvación de las almas”, los pueblos resisten con el cultivo del maíz, incluso países como México que promueven las semillas originarias para frenar su despojo y privatización por grandes empresas; actualmente el maíz, es el grano más producido a nivel mundial dejando en niveles más bajos al trigo y el arroz.

Cabe mencionar que no se pretende estar en contra del trigo, grano alimenticio, ya que así como el maíz; es uno de los productos más importantes en la dieta de los pueblos; por el contrario; ojalá todo el mundo tuviera acceso a estos productos para asegurar su soberanía alimentaria; por otro lado; la intención es mostrar su historia y cómo los colonizadores lo utilizaron como producto y mecanismo de dominación cultural, religiosa, espiritual, político y económico; así mismo, destacar las formas de resistencia de nuestros pueblos por asegurar la vida a través del milenario grano del maíz que ojalá tenga larga vida.

Texto e imágenes investigación de: Tja Mash y Martín Martín Vásquez, agosto 2025, investigador y promotor del Pluriverso y la Plurinacionalidad desde la Nación Mam, Tja Mash; San Martín Chile Verde, Quetzaltenango, Guatemala Plurinacional.